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Confirmación en Tarragona

29.04.2018

El domingo 29 de abril, el Evangelista de Distrito Suter, realizaba un Servicio Divino con Confirmación en la Comunidad de Tarragona.
 
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El Evangelista de Distrito, podía manifestar la emoción y los nervios por este acto tan especial que podía realizar junto a la comunidad.  Para este día, utilizaba la palabra de Efesios 5:1 “Sed, pues, imitadores de Dios como Hijos amados”

Durante la prédica explicaba y aconsejaba sobre la responsabilidad que a partir de la Confirmación tendría nuestra hermana.  Esa misma responsabilidad está vigente en todos los hijos de Dios.  Las palabras de promesa de fieldad hacia el Padre celestial y ese voto de la confirmación, siempre están presentes en nuestros corazones.  Cada vez que participamos en una confirmación, también es una oportunidad para renovar nuestro voto personal.

Como hijos de Dios sabemos que nuestro Padre se ocupa de nosotros y que su amor es perfecto e incondicional, y no cambia.  Para ser imitadores de Dios debemos estar cerca suyo y buscar el contacto con Él en la oración.  La obediencia y el temor de Dios nos conducen a aparecernos cada vez más al Padre.

El Evangelista y el Presbítero eran invitados a colaborar en la prédica y también podían manifestar lo que había en sus corazones.

Para recibir la bendición de la Confirmación, nuestra joven hermana era invitada al altar y el Evangelista de Distrito le expresaba unas palabras.  “Es una gran alegría. Lo que tú vas a vivir hoy lo recordarás siempre.  Pasarán años y recordarás lo vivido con la comunidad y tus padres el día de hoy.  Esto quedará guardado en tu corazón.  Hoy estás delante del altar con el deseo de hacer una promesa al amado Dios.  Hasta ahora tus padres habían tomado esa promesa, y hoy tomas tú esa responsabilidad de seguir fiel al amado Dios.  Es una responsabilidad muy grande, y ahora la tienes que llevar tú y no será nada fácil, pero hay que tener en cuenta que esa responsabilidad viene con una gran bendición.  Las bendiciones para un hijo de Dios son lo más grande.  Con la bendición recibimos fuerzas de Dios, y no es lo mismo tener una responsabilidad que uno no pueda llevar porque es mucha carga, que una responsabilidad que uno puede llevar porque tiene las fuerzas.  El amado Dios también te dará las fuerzas necesarias.  Hoy haces la promesa delante de Dios y la Comunidad, y todos somos testigos de esa promesa que hoy harás a Dios.  Él sabe lo que hay en tu corazón.  Con la confirmación se te abren nuevas puertas.  Ahora podrás estar con los jóvenes e involucrarte con las tareas de la comunidad.  Eso es un deseo que viene con la confirmación, que tu traigas todos tus dones y los pongas al servicio de la comunidad.  También será una alegría que tú con tú corazón puedas ayudar en la comunidad, en el coro, en la enseñanza con los niños, o en cualquier otra actividad”

Nuestra joven hermana decía el voto de la confirmación y podía recibir por fin esa bendición tan especial.

Todos los presentes podían vivir una fiesta en alegría y comunión, y acompañar a nuestra hermana en este momento tan especial de su vida espiritual. 

Con motivo de esta fiesta asistieron 4 invitados sumando un total de 41 almas.

Después de saludar a nuestra joven en el altar, podían compartir un desayuno con todos los asistentes.